Ocio Latino-. Ana Rosa Quintana ha leído en su programa de televisión una carta escrita por Ana Julia, la asesina confesa del pequeño Gabriel, en la que pide perdón a los padres del niño y explica qué le llevó a matarlo, reconociendo que, si no se entregó, fue porque no fue “suficientemente fuerte” para confesarlo y que poco a poco se fue “metiendo en una bola más grande”.
A pesar de reconocer este error, Ana Julia sigue insistiendo en que el asesinato de Gabriel fue “un accidente” y no duda en asegurar que la prisión le “pareció el cielo”. Sin embargo y pese a la versión que da a Ana Rosa, Ana Julia continúa diciendo que se han vertido muchas “mentiras” sobre ella, algo que la tiene “impactada”.
Una carta que, según se puede observar, Ana Julia le escribe a la presentadora después de que esta haya iniciado la correspondencia.
Esta es la carta íntegra que Ana Julia, la asesina de Gabriel, le ha enviado a Ana Rosa Quintana:
Hola, Ana Rosa
Gracias por escribirme por preocuparte por mí. ¿Que cómo estoy?
¡Pues te puede imaginar, nada bien! Ante todo pedir perdón a toda la familia de Gabriel y a todas las personas que he hecho daño. No puedo hablar mucho por el secreto de sumario. Lo primero estoy impactada de saber todas las mentiras que se han dicho de mí. ¿Mi versión de los hechos? Fue un accidente y siempre lo diré porque es la verdad. Me asusté mucho y el miedo te bloquea y eso me pasa a mí. No fui lo suficientemente fuerte para decirle a mi pareja ni a nadie lo que había pasado y poco a poco me fui metiendo en una bola cada vez más grande. Sé que no tengo excusa por el accidente. Quité a la persona que amo lo más grande que uno puede tener: un hijo.
Ángel Patricia a todos perdón, sé que pasaré el resto de mi vida aquí pero esto es en lo que menos pienso. Tengo una hija y le he hecho mucho daño. Espero que ella algún día me pueda perdonar. También creo que cometas el delito que cometas nos tienen que tratar como personas. A mí me han tratado muy mal ciertas personas en el calabozo y en más sitios. Por eso cuando llegué a prisión me pareció el cielo, os podéis hacer una idea. Incluso fueron a ver a mi familia a República Dominicana y mi pobre madre sufre del corazón. ¡Y eso no está bien! Tengo mucho que contar y en cuanto pueda lo contaré. ¿Y os digo por qué? Porque lo que está escrito se lee, os seguiré escribiendo en cuanto pueda.
Un saludo y gracias.