La celebración del Día de la Independencia de Colombia tuvo un ritmo inconfundible este domingo en el Teatro Eslava de Madrid. El legendario Julio Ernesto Estrada, más conocido como Fruko, y su emblemática orquesta Fruko y sus Tesos, convirtieron el centro de la capital española en una auténtica fiesta caribeña.
Aunque la asistencia de público pudo haber sido más amplia para rendir tributo a una figura tan influyente en la historia de la salsa, la energía y el entusiasmo no se vieron mermados en una pista del Teatro con aforo completo. Desde los primeros compases, la pista de la sala se llenó de vida con una selección musical a cargo de los DJs de Radio Gladys Palmera, institución clave en la difusión de los sonidos afro-latinos y caribeños en España.
La entrada de la orquesta de 12 músicos marcó el punto álgido de la velada. Al ritmo de clásicos como “El Preso” y “Cachondea”, el público se entregó sin reservas a una explosión de cumbia, salsa y parranda que honró con alegría las raíces musicales de Colombia.
Con más de 60 años de carrera y más de 40 álbumes grabados, Fruko demostró que su legado sigue vivo, vigente y vibrante. Entre canciones, hizo un recorrido por su trayectoria, recordando su papel en la consolidación de la salsa colombiana desde los años 70, y agradeciendo a quienes mantienen este legado encendido generación tras generación.
Fue una noche de orgullo patrio, memoria musical y celebración, en la que Fruko reafirmó su lugar como uno de los grandes arquitectos del sonido latinoamericano, capaz de poner a bailar a cualquier público, en cualquier parte del mundo.















