Francelys María Furcal, la fugitiva más buscada por República Dominicana, ha reconocido este lunes en la Audiencia Nacional que asesinó al encargado de la ferretería donde trabajaba tras una acalorada discusión pero ha pedido no ser entregada a su país alegando que, a pesar de hacer «algo malo», no merece la «mala muerte» que supuestamente le espera en la cárcel.
«Tengo 3 niños pequeños que dependen de mí. En el trabajo recibía mucho maltrato. Me dirán: ¿Por qué no dejaste el trabajo? Pero si tengo 3 niños, tengo que mantenerlos porque soy madre soltera. Dios mío* Yo no consumo drogas, no soy delincuente, yo solo quería trabajar. Por lo que he cometido no merezco mala muerte», ha clamado ante el tribunal que presidía el juez Alfonso Guevara.
En este sentido, la reclamada ha explicado a los magistrados que «en Dominicana vale más el dinero que la vida de una persona». «Si voy a una cárcel dominicana me van a matar (…) Yo no me quiero morir, por favor», ha rogado, entre lágrimas.
Su defensa ha pedido que no se proceda a su extradición alegando las «escasas garantías» a la integridad de Furcal «una vez fuese a prisión» en el país. «Tiene un miedo real de poder morir en prisión por diferentes venganzas, por eso ha solicitado asilo. Se lo denegaron pero recurrió y ha pedido la cautelar de suspensión», ha señalado la letrada.
La Fiscalía, sin embargo, se ha mostrado a favor de su entrega al país caribeño asegurando que concurren todos los requisitos para proceder a la extradición. En concreto, el representante del Ministerio Público ha dejado claro que al serle denegado el asilo «no es posible entender que está pendiente» de ser resuelto. «Consideramos que procede la entrega», ha asegurado el fiscal Carlos Bautista.
ASESINATO EN EL CARIBE
Furcal, reclamada por República Dominicana, fue detenida en agosto del pasado año en el madrileño distrito de Tetuán. La prófuga se había teñido el pelo de otro color y hacía uso de documentación falsa que había obtenido por más de 1.000 dólares en el mercado negro, con una identidad colombiana a nombre de otra persona.
Los hechos se remontan a abril de 2022, cuando la fugitiva y el encargado de la ferretería donde trabajaba tuvieron una discusión. Según los investigadores, esta cogió un arma blanca de una estantería y lo acuchilló, causándole una herida que finalmente acabó con su vida.
Su búsqueda comenzó en julio de ese mismo año, cuando se recibió información de que la prófuga era de extrema peligrosidad y había asesinado a un varón, abandonando inmediatamente el país.
A partir de ese momento se inició un trabajo de colaboración internacional realizando varias gestiones indagatorias que se prolongaron en el tiempo durante meses y que apuntaban a que la fugitiva podría trasladarse a España.
RD, COLOMBIA, BRASIL, FRANCIA Y ESPAÑA
Esta abandonó inicialmente República Dominicana para llegar a Colombia, donde compró un pasaporte falso con identidad colombiana. Posteriormente viajó a Brasil, donde tomaría un vuelo a París y acto seguido otro a Barcelona.
«Debido a la extrema gravedad de los hechos cometidos y a su gran habilidad para evadirse de la justicia, se consideró por las autoridades dominicanas como la fugitiva más buscada del país», destacó la Policía tras su detención.
En un primer momento la situaban en Barcelona, pero tras varias gestiones y rastreos de todas las personas relacionadas con la detenida la búsqueda se centró en el madrileño distrito de Tetuán.
Ante la «extrema habilidad» de la fugitiva para eludir la justicia y la imposibilidad de localizarla, se llevaron a cabo investigaciones que permitieron finalmente detectar a una mujer que podría tratarse de la buscada.
Esta persona solo salía del domicilio por las noches y, además, cubría su cabello con una red de recogido, lo que «dificultaba su plena identificación».
Finalmente, y una vez interceptada, se pudo verificar que se trataba de la fugitiva gracias al cotejo de sus huellas, a pesar de haberse teñido el pelo y de utilizar una documentación falsa./ Europa Press