Ocio Latino.- El presidente de Perú Martín Vizcarra ha declarado en cuarentena todo el país y ha ordenado la inmovilización de la personas y el cierre de las fronteras durante 15 días, después de un domingo negro donde los contagios por el coronavirus se duplicaron rápidamente hasta llegar a 71 personas. Una cifra altísima teniendo en cuenta que el primer caso se registró el 6 de marzo y apenas nueve días después, ya se contabilizan 71 infectados.
El presidente pidió a los peruanos que se queden en casa. “Que salga una persona o máximo dos, para el tema de abastecimiento, la idea es evitar el contacto físico con otras personas”. Las nuevas medidas son a nivel nacional, las fuerzas armadas y la policía velarán por el cumplimento de las restricciones impuestas para evitar la propagación del coronavirus. Las medidas contemplan el cierre de los negocios, a excepción de farmacias, bancos y establecimientos comerciales de productos de primera necesidad.
Ha sido la medida más contundente, después de estar dictando medidas preventivas que no encontraron el suficiente eco de prevención en la población peruana que empezó a reaccionar igual que en otras grandes ciudades de Europa, realizando compras compulsivas y formando largas colas en supermercados exponiéndose a un contagio y exponiendo a los demás.
A pesar de que las principales playas de Lima fueron cerradas, cientos de bañistas acudían para aprovechar los rayos de sol. La prohibición de reuniones de más de 300 personas para evitar contagios tampoco resultó muy efectiva.
El sistema de salud peruano “no está preparado para soportar una fuerte presencia de pacientes contagiados”, manifestó el decano del Colegio Médico del Perú (CMP), Miguel Palacios en una entrevista.
Las consecuencias que implicará esta cuarentena en un país en el que la mayoría de los ciudadanos tiene empleos informales son impredecibles.
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